El Dinamo Kirov es un modesto club del centro de Rusia, que actualmente milita en el tercer nivel del fúbol ruso, encuadrado en la región denominada Ural-Povolzhye. Disputaba un partido de la décimotercera jornada del campeonato, ante los segundos clasificados, el Zenit Izhevsk.
El colista dio la sorpresa en su visita al Zenit cuando en el minuto 14, una fuerte racha de viento empujó al balón, que había sido jugado en largo por Shoguenov, el cancerbero del Dinamo, pillando por sopresa a propios y a extraños.
Ya el vuelo del balón fue más largo de lo normal, pero el bote fue lo que descolocó al arquero rival. Muy lejos del área para salir a despejarlo, mejor esperar un segundo rebote contra el césped, debió pensar. Lo que no esperaba es que el viento de nuevo ayudase a su contrario, pues no hubo un segundo bote.
El balón ganó la suficiente altura para superar al arquero, y una endiablada velocidad que hizo inútil su reacción.
El gol de arco a arco de Borís Shoguenov arquero del Dinamo de Kírov, tercera división de Rusia. pic.twitter.com/X41Nn8fLKy
— Jaime F. Macias (@Jaimefmacias) octubre 4, 2015
(No le hagan caso, créanme a mí: el Dinamo Kirov juega en tercera)
El partido, finalmente, terminó 3-2, y dejó el gol de Shoguenov en poco más que una anécdota.