Apenas tiene 26 años. Podría ser uno de los hombres que marcaran el futuro del fútbol mundial, pero su apuesta salió rana y se encuentra jugando en la Segunda B española. Hablamos de Gai Assulin, una de las grandes promesas de la cantera del Barcelona, que tuvo que acabar emigrando tras no poder triunfar en la Ciudad Condal.
Assulin irrumpió con fuerza en 2008 en los medios. Tenía 17 años y muchos pedían una oportunidad con el primer equipo para este extremo regateador que llevaba deslumbrando en Barcelona desde edad cadete. Messi la tuvo, Bojan también. Y Gio Dos Santos, otro crack de la cantera 'culé', también.
Sin embargo, pese a que contó con minutos en amistosos de pretemporada, Assulin nunca tuvo la oportunidad de asentarse en el primer equipo del Barcelona. No convenció a Guardiola y decidió apostar con fuerza por el Manchester City.
Si a otros canteranos como a Cesc les había ido bien en Inglaterra, ¿por qué a él no? En Barcelona se tiraban de los pelos por la estrella que podían haber dejado escapar, pero el tiempo les dio la razón.
Tras no hacerse un hueco en el primer equipo de los 'citizen' y tampoco convencer en una cesión al Brighton, regresó a España para intentar ganarse con su calidad a varios equipos de Primera y Segunda. Sucesivas experiencias en Racing, Granada, Hércules o Mallorca no dieron el fruto esperado y acabó yéndose en 2016 al Hapoel Tel Aviv de su Israel natal, donde apenas estuvo un puñado de meses.
Regresó de nuevo a España para jugar en una división aún menor, la Segunda B, con el Sabadell, donde aún sigue jugando. Porque uno no siempre puede cumplir lo que se espera de él, pero eso no quita que se pueda ganar la vida haciendo lo que más le gusta...