"Yo no me rindo jamás aunque los nubarrones estén encima. Lo he pasado muy mal en verano y en las primeras ocho jornadas para rendirme ahora. Cada uno tenemos nuestra responsabilidad y hay que aceptarla", dijo en sala de prensa tras caer en Getafe.
LaLiga acaba la primera vuelta y el técnico madrileño hizo balance de la misma. No debe ser bueno debido a los 11 puntos sumados en 19 jornadas y los récords negativos marcados.
"Ha sido una primera vuelta mala en cuanto a los puntos, que es consecuencia de situaciones como las de hoy. Somos incapaces de cerrar un partido, sabíamos que a balón parado podía pasar eso. No estábamos para regalar nada, necesitábamos mucho los puntos. Ahí están los datos, son demasiadas derrotas, las sensaciones son de desánimo, es normal con los resultados que estamos teniendo", declaró.
Míchel intentó lanzar un capote a sus futbolistas. "Tengo fama de defender a los jugadores. Hay muchos con mala cara, sufriendo por la situación, que es tremendamente delicada. Lo que puedo decir bueno de ellos es que hacen lo que pueden, compiten. Pero cualquier desatención se convierte en una losa y ya son demasiadas. Es gente joven y a veces no están preparados para este tipo de situaciones", señaló.