El partido entre el Levadia y el Paide de los dieciseisavos de final de la Copa de Estonia pasará a la historia por brindar uno de los goles más extraños que jamás se han visto.
Los jugadores del Paide sacaron de centro y a los 15 segundos ya habían recibido un gol en contra. El rival, el Levadia, ni siquiera había tocado el balón, pero ya ganaba 1-0.
Kase se marcó en propia puerta uno de los goles más extraños y ridículos que se recuerdan.
Solid first 15 seconds from this Estonian outfit. pic.twitter.com/MlqPBHSiD6
— IBWM (@Inbedwimaradona) 9 de agosto de 2017