"Creo que en ningún caso he tomado partido y no soy primera línea de ninguna opción política. Sólo he pedido que se vote y que cada uno vote lo que quiera, sí, no, en blanco o nulo", dijo el central catalán tras la polémica suscitada por sus palabras durante el 1-O.
Y fue más allá. "Pienso que se puede ser independentista y defender la camiseta de la Selección Española. Y no es mi caso", aclaró Piqué en relación a un supuesto conflicto entre sus ideales políticos y su defensa de la camiseta de 'la Roja'.
"Si actualmente no hay una Selección Catalana, entiendo que un independentista pueda jugar con España. Y repito que no es mi caso", insistió el central, que incluso fue preguntado de manera directa por su postura en relación a la independencia de Cataluña.
"No podría dar una respuesta. Hacerlo supondría perder a la mitad de mis seguidores, porque la gente siempre antepone la política a todo lo demás", reconoció Piqué, que además recordó que sus hijos tienen parte de colombiano y libanés y que para él los países no son tan importantes hoy en día.
"Hay un problema político que va a más. O se encuentra una solución, que es el diálogo, o esto va a ir a más", añadió también en relación al creciente conflicto catalán.
Finalmente, Piqué comparó la situación de España y Cataluña con la de un padre y un hijo e insistió en la necesidad de que haya un diálogo entre ambas partes. "Se tienen que sentar a hablar y, al final, se llega a un acuerdo o el hijo se puede ir", analizó metafóricamente.