Parecía que nunca llegaría, pero Kylian Mbappé también ha acabado acusando su primer bajón serio desde su explosión. El futbolista del PSG, una de las mayores promesas del planeta, llevaba prácticamente un año de exhibición en exhibición, pero la pólvora se le apagó en el peor momento.
Aunque marcó ante el Metz, Mbappé no cuajó su mejor partido y estuvo impreciso y fallón, algo que también le sucedió en la eliminatoria ante el Real Madrid. "Este no es mi mejor momento de la temporada", reconocía el joven futbolista tras el choque ante los colistas de la Ligue 1.
Desde el 7 de enero, cuando arrancó el año con un doblete y dos asistencias en la Copa de la Liga, el ariete del PSG ha jugado 12 partidos y sólo ha visto puerta en tres de ellos, no siendo capaz de dar ni una sola asistencia a sus compañeros.
En este tiempo, Mbappé también vio una inexplicable roja directa ante el Rennes en la Copa Francesa y pasó de puntillas por la eliminatoria ante el Real Madrid en la Champions League.
Sus números contrastan con el espectacular mes de diciembre que había firmado el joven de 19 años, en el que había logrado cinco goles y cuatro asistencias en seis partidos.
Un bajón entendible a su edad y que Unai Emery explicó con detalle tras el último partido del equipo: "Se frustra rápidamente cuando pierde una acción y tiene que trabajar en eso. Es joven y va a pasar por momentos como estos y tiene que aprender".
Con el Mundial a la vuelta de la esquina, a Mbappé aún le queda mucho aprendizaje esta campaña, por mucho que el PSG se haya quedado sin prácticamente objetivos tras la eliminación europea ante el conjunto blanco.