Boca Junior se chocó una y otra vez con Franco Armani. Imbatible, insuperable... una pesadilla para los 'xeneizes'. El guardameta las sacó de todos los colores para mantener en ventaja a los 'millonarios' en la final de la Supercopa.
Fue sobre todo después del descanso cuando comenzó su recital. Le sacó una a Pavón que se terminó estrellando contra el larguero tras una de sus estiradas imposibles. Sólo un minuto después, sacó a bocajarro un cabezazo de Goltz cuando muchos ya cantaban gol
15 de marzo de 2018
15 de marzo de 2018
Pero no se quedó ahí la exhibición. Detuvo una doble ocasión impresionante. Primero se la sacó a Cardona con el pie en un mano a mano y luego a Nahítan Nández en el rechace. Nadie podía marcarle.
15 de marzo de 2018
"La más difícil fue la de Pavón, una que pegó en el travesaño. La alcancé a tocar. Había rebotado en un compañero, venía englobada. Fue difícil y gracias a Dios pudo ir afuera", dijo tras el partido.
Por todo ello, la organización le coronó como el jugador del partido. Y bien merecido.