Ciro, mientras estabas con mamá Antonella y tus hermanitos Thiago y Mateo, tu padre firmó un nuevo recital de fútbol. Son incontables ya. En sus casi 15 años de carrera, Lío, como se hace llamar el mismo, ha ido de exhibición en exhibición. Ha ganado Ligas, Champions, tiene cinco Balones de Oro... Le falta en Mundial, cierto. En Rusia volverá a tener una oportunidad.
Debes saber, pequeño, que tu padre es el mejor futbolista de la historia del FC Barcelona. De ello no hay duda. Es el jugador que más goles ha marcado con la camiseta azulgrana, el que más asistencias ha dado, y junto a Andrés Iniesta el que más trofeos ha levantado. Casi todos los récords del Barça llevan su nombre. Te darás cuenta cuando visites tu nuevo campo. En la entrada hay una imagen gigante que lo prueba. Por algo es el rey del Camp Nou.
Cuando tengas uso de razón, quizá tu padre ya no esté jugando. Su legado será eterno. Ya no sólo por las cifras, sino por las obras de arte regaladas al planeta fútbol. No es tanto el qué, sino el cómo. No hay gol, no hay jugada, no hay rival que se le haya resistido. Retos superados de la forma más bella posible.
Ante el Chelsea, uno de los rivales que más sufrimiento le ha dado (hace seis años le hizo llorar), papá Leo marcó un gol, dio otro y firmó el tercero. Todos los goles que marcó el Barça ante el equipo de Londres pasaron por sus botas. Ya tendrás tiempo para probártelas, aunque te queden grandes. Seguro que habrá muchas Adidas por casa.
Esta noche, tumbó a Courtois nada más empezar el encuentro y regaló a Dembélé el segundo. No tuvo reparos en robarle la pelota a uno de tus tíos, Cesc Fàbregas. Así es Leo, pura ambición. Siempre quiere ganar. Notarás sus mosqueos cuando pierda.
En la segunda parte, cuando más sufría su equipo, pegó una carrera, adelantó a sus adversarios por el costado y volvió a derribar a portero del Chelsea. Cuando más lo necesitó el Barça, apareció. Como casi siempre.
Cuando nació Thiago, tu padre le dedicó un gol al siguiente partido. Cuando llegó al mundo Mateo, hizo lo mismo. Tú no ibas a ser menos, Ciro. Para ti, dos goles, una asistencia y otro recital para la leyenda.
14 de marzo de 2018