El número que hizo que le bautizaran como 'D10S', fue el legado de un gran maestro: Ronaldinho. En su debut con el Barça, Messi no lucía el número con el que acostumbramos a verle, sino el '30'.
Con ese primer dorsal estuvo 33 partidos y anotó ocho tantos. Más tarde se acercó al '10' que ansiaba con el número más parecido, el '19', un dorsal que le acompañó durante 77 partidos (39 goles).
Al inicio de la temporada 08-09, Leo saltó al campo por primera vez con el número con el que se convirtió en leyenda, el '10'. Han pasado casi 10 años desde entonces y Messi ya ha logrado su gol número 500 con este número.
Para lograrlo, Leo tuvo que vestirlo durante 516 choques, lo que le deja un promedio de casi un gol por partido, una cifra brutal que sólo ha podido lograr siendo 'D10S'.