Ante el Levante, Modric destacó por su manejo y conducción del esférico en el centro del campo. El croata ofreció pases que rompieron las líneas rivales y lideró el ritmo del partido cada vez que el balón se posaba en sus botas.
Modric tiró del carro en el Ciutat de València como ya viene siendo habitual en él, pero, en esta ocasión, el resultado no acompañó el buen partido de Luka.
Con 26 partidos disputados en lo que va de curso y dos tantos conseguidos, Modric es el desastacador madridista en el centro del campo, el creador de asistencias, el líder de una medular perdida sin su presencia.
El veterano centrocampista destacó en el partido de Liga y toda la afición 'merengue' confía ya en Modric para que vuelva a liderar al Real Madrid también ante el París Saint-Germain, el próximo 14 de febrero, cuando la Champions League vuelva a escena.
Si Modric es Modric también ante los de Emery y compañía, y el resto del equipo responde al croata, el Real Madrid podrá hacerse fuerte ante los parisinos, en una Champions League que es la última esperanza blanca.