La cantera de invierno

No hace falta ser adivino para imaginar que Loren, en lugar de nacer en Marbella y provenir del Betis Deportivo, hubiera sido, por ejemplo, croata o esloveno, hubiera llegado cedido desde la Premier League con un opción de compra de equis y marca tres goles en dos partidos que son seis puntos: el desiderátum.

Hasta siete jugadores formados en los campos de la 'Luis del Sol' se han enfundado en partido oficial la zamarra verdiblanca en esta temporada en la que los últimos productos de esa factoría han sido los protagonistas de la jugada que anoche le dio la victoria al Betis en Riazor: Júnior que dio el pase y Loren que lo remató.

Junto a ellos, en el once que puso en liza el Betis estaban el centrocampista diestro reconvertido en lateral Francis Guerrero; Joaquín, líder del equipo, y Fabián Ruiz, llamado a sucederle.

Júnior, de 21 años, y Loren, de 24, son los últimos en llegar y lo hacen, además, por una decisión técnica, ya que en el banquillo de Riazor estaban los presumibles titulares en sus puestos, el internacional danés Riza Durmisi y Sergio León, respectivamente.

Además de Durmisi y León, quien esta temporada regresó desde Osasuna a la casa en la que se formó, estaban como reservas otros dos jugadores de los escalafones inferiores del Betis como el portero Pedro López y el lateral diestro Rafa Navarro.

"Hay gente que piensa que antes de los partidos fumo algo raro y que de repente tengo caprichos", señaló al término del partido el entrenador bético, Quique Setién, para quien tanto Loren como Júnior llevan con él desde la pretemporada "han ido creciendo, han bajado con el filial, han entendido muy bien las cosas y están ahí".

Fruto de esa filosofía es la eclosión en Primera de Loren, autor de los dos goles de la pasada jornada ante el Villarreal (2-1), la de su debut, y el de ayer ante el Deportivo; el de Júnior, Francis y, como mascarón de proa generacional, el centrocampista Fabián, quien ha 'explotado' en la élite tras un año en el Elche.

Liderados todos en el campo por el capitán Joaquín Sánchez, de los más grandes que han salido de la cantera bética, los jóvenes que entran lo hacen con la confianza del banquillo y el apoyo de jugadores consolidados, como el único fichaje invernal, el central internacional Marc Bartra, que son los que permiten que el balón no queme en los pies y se pueda crecer.

En esa línea, mantenida también desde la dirección deportiva de Lorenzo Serra Ferrer, este año han debutado en el primer equipo bético el centrocampista Julio Gracia, el delantero Aitor Ruibal, el colombiano Juanjo Narváez -cedido en el Córdoba-, Francis Guerrero y Carlos Redruello 'Redru'.

Además de estos jugadores que ya han disfrutado de la titularidad en competición oficial, Setién ha recurrido a otros muchos durante la pretemporada y suele hacerlos entrenar de forma regular con el primer equipo: Iván Navarro, César de la Hoz, Nacho González o el portero Pedro.

La importancia de sentir los colores va acompañada de otros factores como el hecho de que, con confianza y una línea de trabajo, se puedan hacer cosas en el primer equipo que ya se han practicado en el filial, como Júnior reconoció anoche de su pase a Loren.

"Es lo mismo que hacíamos hace tiempo. Hoy ha sido así y esperamos que puedan ser muchos más días así. Ojalá", afirmó el dominicano que llegó al Betis en 2014 procedente del Puerto Malagueño, aspecto que comparte también con Loren, quien hizo lo propio en el mercado invernal del mismo año desde el Vélez.

Aunque para que todo ello sea posible, fútbol es fútbol y lo fundamental es el estado balsámico que producen los resultados, la tranquilidad de encadenar dos victorias consecutivas y estar en octava posición con 33 puntos, a dos de los puestos europeos.