Sergio Gómez dejará el Barcelona y reforzará al Borussia Dortmund, un club que pagará una buena cantidad por su traspaso, le ofrecerá un alto salario y le promete que tendrá hueco pronto en el primer equipo. No es el primero ni será el último en hacerlo. Otros, como Cesc y Piqué, pudieron regresar, mientras que Fran Mérida nunca alcanzó el nivel que se esperaba de él, aunque su salida también fue bastante polémica.
Tras el adiós de Eric García y Jordi Mboula en dirección a Manchester City y Mónaco, Sergio Gómez será el tercer proyecto de crack del Barça que deja La Masia para probar suerte en un grande europeo.
El subcampeón del mundo Sub 17, que según apunta 'Sport' no quiso escuchar ofertas del Barcelona, dejará las categorías inferiores del equipo azulgrana después de que el Borussia Dortmund decidiera hacer frente a la cláusula de rescisión de tres millones de euros del jugador.
Una cantidad que sólo el tiempo dirá si es asequible o desmesurada. Si el jugador cumple con lo que promete, el fichaje acabará siendo una ganga y en el Camp Nou se tirarán de los pelos una vez más, pero cuántos han hecho lo mismo y se han ido quedando por el camino...
Llama la atención, en cambio, el poco éxito que está teniendo el conjunto azulgrana a la hora de atar el futuro de sus jóvenes más prometedores. Mientras el filial se nutre de jugadores con experiencia y algo más mayores -entendible dada la categoría en la que se desenvuelve el Barça B-, no es menos cierto que los canteranos 'culés' siguen teniendo oportunidades.
¿Por qué entonces algunos deciden marcharse? Pues bien, la carrera de un deportista no es excesivamente larga y hay quienes prefieren irse asegurando el futuro con buenos ingresos antes que desaparecer del mapa por apostar por un sueño.
Mónaco, Borussia... y hasta Manchester City se permiten el lujo de prometer entrenar con el primer equipo e incluso hacer debutar a estas estrellas en ciernes, algo que en el Barcelona aún les quedaría demasiado lejos. Aunque Mboula, por ejemplo, apenas ha tenido presencia en el Mónaco, sí que es cierto que los del Principado ya le han renovado, aumentando de nuevo sus emolumentos y cotización... y eso es algo que el Barcelona no estaba dispuesto a asumir. Al menos no a corto plazo.
Mientras que ha habido ocasiones en las que no le ha salido demasiado bien -los mencionados casos de Piqué, Cesc, Grimaldo o incluso Sanabria, entre otros-, sí que es cierto que en otros casos el tiempo ha terminado por dar a los azulgranas la razón -ejemplos de Patric, Adama Traoré...-. ¿Dónde está la línea que divide el acierto y el error en estos casos? Probablemente, en los tres millones de cláusula que los azulgranas han establecido para sus juveniles. Una cantidad que, si todo continúa como hasta ahora, los 'culés' tendrán que volver a aumentar próximamente.