El club donostiarra continúa eliminando cualquier visualización de 'Qbao.com' en todo tipo de soportes y prendas de ropa. Su consejero delegado, Zhang Xiaolei, continúa en prisión por sus acusaciones de fraude y, por el momento no ha visto nada del dinero que esperaba ingresar hace unas semanas.
El primer paso ya se dio en Butarque, cuando se retiró la publicidad de la firma china de la camiseta del primer equipo. Lo mismo ocurrió en Anoeta contra el Barcelona el pasado sábado. El problema es que no dispone de mucho remanente de camisetas limpias de publicidad, de ahí que pidiera jugar en campo del Leganés con su primera equipación.
En las tiendas se siguen vendiendo las camisetas antiguas a la espera de que Adidas provea de nuevo material. No están muy contentos tampoco en la Real con la velocidad de movimiento de los alemanes, así que ya se ha perfilado un acuerdo con Macron para la próxima temporada.