Sólo fue un susto. Un susto que se alargó hasta los 20 minutos, justo el tiempo que tardó Lewandowski en comenzar el festival goleador en forma de remontada del Bayern de Múnich en el Allianz Arena.
El Hoffenheim se hizo grande en el templo alemán, se vino arriba y a los tres minutos de partido ya estaba celebrando un tanto, obra y gracia de Uth. Ocho minutos después, vuelta a la misma historia, esta vez gracias a Gnabry.
La afición del Bayern presente en el estadio no podía creerse lo que estaba viendo y comenzó a presionar a los suyos, que no tardaron en reaccionar. Tras el mencionado tanto de 'Lewy', que se aprovechó del remate de Kimmich para rozar el esférico, llegó el de Boateng cuatro minutos después para devolver la igualdad en el marcador.
Con un remate de cabeza tras un saque de esquina lanzado por Robben desde la derecha, Jerome Boateng devolvió el empate al marcador en el minuto 25 de la primera mitad.
La segunda mitad comenzaría con el luninoso del Allianz Arena tal y como lo hizo en la primera, pero con las ilusiones del Hoffenheim apagadas y la autoestima del Bayern aumentada.
Coman, en el 63, pondría el gol de la remontada en el luminoso gracias a un perfecto remate raso a pase de Lewandowski y Arturo Vidal, tres minutos después, celebraría de cabeza el cuarto.
Cuando el partido ya estaba muriendo entre los últimos segundos, Wagner se unió a la fiesta gracias al centro de Rafinha, para hacer de un 0-2 una remontada en forma de 'manita' que los hombres de Heynckes celebraron con rabia.
Tres puntos más para un líder que ya alcanza los 50 en la cima de la Bundesliga, mientras que el Hoffenheim se mantiene noveno con casi la mitad de puntos, 27.