Tal y como se prevía después de la derrota en el Coliseum, el Málaga busca un giro de timón en el banquillo de cara a la segunda vuelta. Con once puntos, a cinco de la salvación, las sensaciones que estaba emitiendo el conjunto blanquiazul en los últimos encuentros eran de deriva. Después de varias deliberaciones internas, el presidente Al-Thani dio el visto bueno al despido del entrenador.
Y es que el club de Martiricos completó el viernes la peor primera vuelta de su historia, algo que ha terminado de agotar la paciencia, a pesar de que Míchel se sentía preparado para seguir peleando la permanencia.
"Desde el Málaga CF agradecemos al técnico Míchel González su profesionalidad y comportamiento y le deseamos mucha suerte para el futuro", escribió el club en el comunicado con el que hacía oficial la noticia.
Por el momento no hay candidatos para suplirle, aunque la intención es una contratación exprés para que el nuevo inquilino del banquillo pueda trabajar cuanto antes. Al respecto, el club aclaró que ya "trabaja en la incorporación de un sustituto y, sobre todo, en la búsqueda de una nueva ilusión que motive a todo el malaguismo".
Asimismo, desde la entidad de Martiricos se ha intentado aprovechar el momento para emitir un mensaje de calma. Se consideran "una familia que siempre ha demostrado que está unida en todos los momentos el amor a este sentimiento y estos colores".